miércoles, 19 de noviembre de 2008

El dichoso meme

Las reglas:

1.- Poner las reglas en tu blog.
2.- Compartir seis cosas que me gusten y seis que no me gusten.
3.- Elegir seis personas al final y poner los enlaces a sus blogs.
4.- Avisar a estas personas dejando un comentario en sus blogs.

Con éste texto (gracias, amado Copy&Paste), mi recién casada amiga Gaby-ota me invita a unirme a algo que los bloggeros de alcurnia, los de alta escuela, los de mucho vuelo... ¡los "meros-meros", vaya! han posteado alguna vez en su página. Un meme... ¿un... what? Bueno no sé lo que es, pero acatando las escuetas instrucciones de Gaby-ota, me dispongo a informarles a mis 4 (ocasionalmente 5) lectores:

Lo que me gusta:

1. Me gusta mucho el café. En todas sus formas. Es un vicio que tengo muy arraigado desde que, en prepa, mis amigas me presentaron al más seductor de los brebajes. Lo malo es que, después de cada taza, y para conservar la "sonrisa Colgate", debo hacer una rápida incursión al baño, aunque sea para hacerme un enjuague veloz y seguir deslumbrando al mundo con mi sonrisa "insanely white", muy al estilo de Ross Geller.

2. Me gusta amanecerme de repente haciendo nada... o todo... o algo específico. El caso es que hay ocasiones en que, sin ningún motivo en especial, pongo música y me tiro a soñar despierta. O me devoro una novela que no he podido terminar por no tener tiempo para leer. O decido que estoy en el "Cositas Mood" y me pongo a bordar o a hacer adornos navideños en pleno Marzo. O me amanezco creando story-boards de productos que ni existen, pero fantaseo que se gana todos los premios habidos y por haber. O decido que no me gusta el orden de las conservas de la alacena y cambio todo de lugar. Pero creo que en el fondo me gusta mantenerme ocupada para ser de las primeras afortunadas personas que ven un amanecer... con mi café en la mano, claro.

3. Me gusta consentirme bien cañón. Pero a lo grande, a lo Paris Hilton. Reservo mi fin de semana para hacerme desde las pestañas hasta los dedos de los pies. Los masajes son mi perdición, podría asegurar que los he probado todos. Lo bueno es que no lo hago muy seguido porque quedaría en la ruina.

4. Me gusta sentir que contribuyo a hacer de éste un planeta más limpio para los demás, aunque yo a los demás les valga pepino. La mayor parte de lo que consumo es orgánico. En mi automóvil llevo mi bolsa muy mona para mis compras del super para no consumir ni siquiera papel. Uso el auto lo menos posible. Me baño (y muy bien bañada) en 6 minutos y medio. Separo la basura metódicamente en 7 categorías diferentes (cosa que asombra a mi adorado tormento). Recojo hasta la basura que ni es mía. Soy todo un caso clínico y, releyéndome, me doy penita por nerd.

5. Me gusta Halloween. No sé ni cómo explicarlo, pero es mi festividad favorita. Y la caja que guarda mis adornos de Halloween es tres veces más grande que la de adornos navideños. Y sí me gusta Navidad, pero en menor medida.

6. Me gusta el frío. Me encanta sentir que voy vestida con capas y capas de prendas abrigadoras, o sentir el peso de varios cobertores a la hora de dormir. Pero lo que más me gusta del frío es el desenfado con el que me paseo por toda la casa con mis provocativos mamelucos con dibujitos para toda ocasión que bastante trabajo me ha costado conseguir.

Lo que no me gusta:

1. No me gustan los malos olores. Soy "vomitona" por convicción y un olor desagradable cerca de mí traerá consecuencias funestas. Por ésto, y porque la verdad sea dicha soy bastante odiosa, siempre cargo en mi bolso toallitas perfumadas... ¡agh... la odiosa!

2. No me gustan los bichitos. Las arañas, los grillos, las moscas, los gusanos, las palomitas, las catarinas, las hormigas y un largo etcétera me dan "kiki", me asustan y me dan asco. El único bicho que soporto es mi lombriz intestinal y eso porque ya somos grandes amigas.

3. En mi trabajo, es muy común el "name-dropping". No me importa si conoces al director general desde que eran niños, ni me importa si te codeas con lo más podrido de la política o lo más rancio de la realeza. La gente que se siente realizada a través del nombre o de la importancia de los demás es mediocre a más no poder.

4. No me gustan las fiestas sorpresa, lo que supone un gran desencanto para mis amigos. Les costó 3 fiestas a mis allegados el comprenderlo. Y aún recuerdo con morboso placer que de cada una de ésas fiestas me enteré un poco antes y nunca aparecí... je, je... Sufran, canallas.

5. No me gusta La Lista de Schindler, ni el Titanic, ni la historia de Anna Frank ni nada que tenga que ver con el sufrimiento humano. Bastante tengo con mis miserias, gracias.

6. Tampoco me gustan las pelis de terror. Y no tiene que ver con el sufrimiento humano (que es bastante), es que sí soy miedosilla.

Ahí está, amiga. Me tardé pero... ¡bueh! Ya me conoces. Y seguramente me caerá una maldición, porque no sé a quién enviárselo. Fin.

sábado, 8 de noviembre de 2008

Reflexiones

Mientras Gaby-ota me esclarece qué demonios es un "meme" y qué debo hacer, haré una reflexión...

...

Ya. Era personal. Y otra reflexión (ésta sí es para todos):

Siempre me pasa. Pero últimamente me ha sucedido más. Deben ser los años que llevo casada. Pero no falta en las reuniones la tía-metiche-pobredetí que me pregunta con ese tonito dulzón que odio: "¿Y ustedes? ¿Para cuándo los hijos, eeeeeeeeeeeh? Si se tardan, tendrán nietos, jijiji". Estúpida, qué graciosa.

La verdad me da miedo. Es un miedo terrible que me atenaza la garganta, me hace sudar frío (¿les ha pasado o mi desodorante es súper cool?), me despierta por las noches y se agazapa en los rincones de mi mente para aparecer cuando más tranquila estoy. Y es que con el terrible background de mi familia, lo más probable es que lo que engendre para la posteridad sea algo muy parecido a ésto:



Los quiero. Por eso no tengo descendencia. Dios nos libre.